Helados la Perla - Granada, Granada

Helena Sánchez

Helados estupendos. Realmente un muy buen sabor, se nota que son artesanos. Tienen variedad de sabores y toppings.

Además, el trato del señor que nos atendió fue maravilloso.

Sin embargo, los precios quizá no son los más baratos, pero merece la pena probarlos una vez al menos. Especial mención a los sabores de limón, vainilla, vainilla con galletas y y turrón!

Alberto Fernández

Los mejores helados de Granada, totalmente artesanales, con una gran variedad para elegir. Altamente recomendable el de mango (cuando lo pruebas, es como si mordieras directamente la fruta), el de tarta de queso, el de pionono... la lista puede ser casi interminable. En cuanto al servicio, simplemente excelente: te ayudan a elegir, te ofrecen a probar cualquiera de los helados (se nota que es un negocio familiar en el que ponen todo el esmero en su producto y en atender al cliente). En fin, 10/10 y visita obligada.

Elimar Uribe

Helados cremosos y deliciosos, variedad de sabores, me encantó avellana y nueces. El de turrón también. Esta muy rico. Vale la pena, se nota la tradición.

Samaher Talaky

Horchatta is amazing! So refreshing. We loved that the store is family owned and the shop owner is super kind ?

Fatih Koraş

Llevan 90 años produciendo helados. Sin duda la mejor heladería de Granada, la hacen ellos mismos. Cuando quiero comer helado en Granada, no arriesgo la suerte en ningún otro lado, sus productos siempre son de alta calidad y deliciosos, obviamente hechos con amor. El personal siempre sonríe y es cortés.

Sophia

Deliciosos, con varios sabores y opciones.

Karen Trewin

Delicious ice cream and milk shakes - and lovely friendly staff too.
We were confused by Horchata (thought it was milkshake!), but the lady server was patient - we chose coffee ice cream and coconut milk shake, both perfect for a hot sunny September afternoon

Cristina

El trato de la heladera: una impresentable. Como en cualquier heladería, puedes preguntar si puedes probar una cucharadita de un helado. Pues cuando le pregunté, decidió ignorarme y echarme helado en la tarrina. Le repetí educadamente que quería probar y su respuesta fue asquerosamente borde, paternalista y maleducada. Después de eso comenzó a vacilarme porque elegí otro sabor. Y para finalizar, sale de la barra, se pone al lado mía, y me empieza a contar que como llevan casi un siglo vendiendo helados, ese es su sello de calidad y textualmente dijo con sorna: "¿A que cuando vas a un restaurante y quieres paella, no pides antes una cucharadita?" Pues un respeto a los helados, le faltó decir. ¡Señora pesada! Podría haber dicho no se prueban y punto, y no toda esa amargura con la que me tuve que comer ese helado bazofia que de verdad, no estaba tan bueno, muy grasiento y excesivamente dulce. No lo recomiendo y está claro que no volveré nunca.